La Conciliación y el Arbitraje; Materias Pendientes

José Emilio Ruiz Pineda
En cierta ocasión una persona me comentó su extrañez ante mi interés profesional al arbitraje, ampliamente a los métodos alternos de solución de conflictos, cuando siempre me veía en eventos relativos vestido de traje y corbata. Probablemente su desconocimiento de este sistema de resolución deconflictos fuese semejante al que tenía del fútbol, creo que me imaginaba por ahí sacando tarjetas o revisando el VAR, supongo que eso pensaba que yo hacía.
Esta anécdota es, sin duda, un caso extremo, pero puede servir de base para plantearse si realmente la conciliación y el arbitraje han calado en nuestro país. Los que nos dedicamos a la materia podemos correr el riesgo de caer en la autocomplacencia, pensar que las bondades del sistema son compartidas por todos y que el número de conciliaciones y arbitrajesen Honduras están aumentando. Y, aunque no falten motivos de satisfacción, lo cierto es que todavía queda un largo camino por recorrer.